sábado, 27 de agosto de 2011

Curavacas


Tres horas y media escasas desde Madrid hasta Cervera de Pisuerga, desde allí, en poco más de veinte minutos a a Triollo, por la llamada carretera de los pantanos, la base para casi todas las ascensiones en la montaña palentina.

Decisión, hoy el Curavacas, venía pensando en el Espigüete, pero voy solo, así que, a por el Curavacas.

Nada más entrar en Triollo está el puente sobre el río Carrión, hacia mi derecha sale la carretera hacia el cercano pueblo de Vidrieros a 1330 metros de altitud, en tres kilómetros he llegado a la placita del pequeño pueblo, allí aparco el coche y, a mi izquierda, veo la calle Chica por donde inicio la ruta, inmediatamente giro a la izquierda y la calle se convierte en una pista.

Medio kilómetro por la pista, llego a un pequeño puente encima de un arroyo y giro a la derecha, hay un hito y una piedra más grandecita donde se indica la subida hacia el Curavacas, que ya aparece a la vista.

Continúo por la pista, cada vez más angosta y empinada, cruzo dos puertas metálicas, la segunda de ellas en otro cuarto de hora, con el camino estrechándose cada vez más, ya es un sendero que va ascendiendo por la margen derecha del arroyo Cabriles, en otros veinte minutos estoy en una zona de prados, el camino es muy evidente y, además, hay hitos de vez en cuando que me lo señalan.

Cuando llevo, más o menos, tres cuartos de hora de caminata, a 1600 metros de altura, cruzo el arroyo Cabriles y sigo el sendero, más angosto aún entre los matorrales y, poco a poco, según se despeja el camino me voy metiendo en una pedrera muy descompuesta, por aquí si que hay bastantes hitos que, aunque el objetivo, arriba, se ve evidente, conviene no perder, ya que la pedrera, muy descompuesta y empinada es de las que, en la subida, un pasito p´alante y otro p´atrás, eso sí, esta pedrera en la bajada es fenomenal para bajar rápido clavando tacón.

En hora y tres cuartos llego al principio del Callejón Grande, los hitos me pegan a la derecha del espolón rocoso, por donde, en ocasiones el camino es más cómodo. La subida por aquí es bastante empinada.

En otra media hora, el sendero cruza hacia la izquierda, dejando arriba el collado que está a la derecha del llamado Diente del Oso, que dejo a mi derecha, estoy a una altura de 2380 metros y así llego, siguiendo los hitos, aquí bastante frecuentes, a la parte más alta del Callejón Grande en otros quince minutos más o menos.

A veces, aunque de manera fácil, hay que echar manos, dejo a mi derecha el Diente del Oso y por una evidente brecha, con unas vistas espectaculares hacia el norte de la Cordillera Cantábrica, un pasito un poco aéreo, pero sin dificultad alguna y giro a la iz

quierda, ya estoy en la cara norte y el viento frío me sorprende, chaqueta y a seguir.

Más suave la ascensión por esta zona que en diez minutos me deja en la cima a 2525 metros de altura.

El día es frío pero está despejado, fotos, al sur la zona de los pantanos palentinos, Triollo, un poco más al oeste el Espigüete destacando de todos de manera espectacular por su color gris, al noroeste se ven perfectamente los Picos de Europa, hacia el este el Diente del Oso.

Bajada por el mismo camino donde me encuentro con un grupito valenciano y, a una de las chicas le ha caído una piedra en el brazo y se le han quitado las ganas de subir a la cima, bajada con ella y otra más que la acompaña, en agradable compañía, en unas dos horas.

En suma, el Curavacas, una ascensión sin dificultades en verano, pero que por sus pendientes, sus bajas temperaturas y la cantidad de nieve en invierno, presenta una dificultad de tipo medio, he visto alguna definición del mismo como un lobo con piel de cordero.


jueves, 25 de agosto de 2011

Barranco de la Peonera en Alquézar



Una de esas actividades que estás deseando conocer, no como para dedicarte a ella, pero si para ver como es la experiencia, pues bien, es de las que enganchan.

Puede parecer que Alquézar es, simplemente, una villa dedicada al turismo de barranquísmo, bueno, si, puede ser, pero además, es una preciosa ciudad medieval, bien cuidada que merece la pena visitar.

Llevé a cabo la actividad con unos viejos amigos, Guías Boira, muy bien, hicimos el barranco de la Peonera, seis horas de actividad, un barranco muy bonito y mereció la pena.

Algunas fotos de la actividad.

martes, 23 de agosto de 2011

Los Breithorn



La cadena de los Breithorn la componen el Breithorn propiamente dicho o Breithorn Occidental con 4165 metros de altura, el Breithorn Central o Mittelgipfel con 4159 y el Breithorn Oriental (Zwillinge) con 4139 metros. Los tres tienen acceso directo desde el llamado Breithorn Pass a 3900 metros y también pueden hacerse siguiendo la arista que une los tres, esta es quizá, partiendo del Breithorn Occidental, la más repetida, sirve además como camino a otras actividades en días siguientes, es lo que nosotros hicimos, en este primer día, salir desde Zermatt para terminar a dormir en el Refugio Ayas a 3394 metros.

Empezamos la jornada saliendo desde Zermatt, donde habíamos dormido (también puede hacerse dejando el coche en la pequeña localidad Suiza de Täsch, el último pueblo hasta donde puedes llegar con el coche. La carretera continúa hasta Zermatt, pero está prohibido pasar. Por tanto, desde Tasch podemos subir a Zermatt en tren o en furgonetas-taxi. Hay muchas furgonetas-taxi y más baratas que el tren.

Atravesaremos Zermatt en dirección sur para acceder a Winkelmatten, la estación de teleférico. Nuestro destino es Bergstation que es la estación de sky del pequeño Cervino. Para ello habremos de tomar el telecabina que nos subirá a la estación intermedia de Furi a 1.886 metros, aquí tomaremos otro que nos llevará a la estación intermedia de Trockener Steg a 2.939 metros donde tomaremos el último que nos dejará en Klein-Matterhorn a 3.825 metros.

A la salida crampones y piolet, coincidimos un tramo con las pistas de esquí, seguimos de frente, en dirección sur, para, en breve girar a la izquierda para llegar a la base del Breithorn, que queda a nuestra izquierda. La subida por aquí es muy suave, casi llano, hasta llegar a la base de la montaña, un ascenso que está siempre con mucha huella, al principio haciendo zetas y, enseguida, girando suavemente hacia nuestra derecha hasta la cima.

Sencillo, un desnivel de 330 metros, las últimas rampas tienen un máximo de un 35% de desnivel y, lo único a tener en cuenta, es que estamos a más de 4000 metros de altura y hay que controlar los efectos del mal de altura ya que, a través de los teleféricos, habremos subido muy rápido. Desde el teleférico habremos tardado una hora y cuarto escasa, la cima es como una loma longitudinal, no es pequeña, descanso, fotos, las vistas del Cervino hacia el oeste o del macizo del Monte Rosa hacia el este, si el día acompaña, son espectaculares.

Aquí, casi todos se dan la vuelta y dan la jornada por concluida, pero la arista hacia el este con su huella nos baja hacia el primer collado entre los Breithorn (unos cien metros de descenso) y, la huella muy bien marcada nos lleva, por el este de la arista, con cuidado de no acercarse demasiado a la cornisa por el peligro de ruptura y, enseguida estamos en la cima del Breithorn Centra, poco más de media hora.

Desde aquí sigue la arista hacia el Breithorn oriental, con una escapatoria hacia el Breithorn Pass justo en el collado, muy poca bajada, que separa el Breithorn Central del Oriental, nosotros no hicimos la subida al Oriental, bajamos por esta escapatoria hacia el Refugio Ayas como fin de esta primera jornada.

Las fotos de la actividad.

martes, 16 de agosto de 2011

Alphubel


Me quedaron las ganas de hacerlo el año pasado después de ascender al Allalinhorn desde el refugio Britannia, pero no había tiempo, así que este año era uno de mis objetivos, lo hicimos además en plan circular para conocer las dos vertientes, para ello subimos en el metro Alpin desde Saas Fee (por cierto 66€ por persona, por un día) subimos, pasando al principio entre las pistas de esquí que empiezan justo en el Metro Alpino del Allalin, hasta el collado que separa el Allalinhorn, que quedaría a nuestra izquierda y giramos hacia la derecha hacia el pico Feechopf de 3888 metros de altura, paso obligado hacia el Alphubel al que subimos por esta vertiente y bajamos por el glaciar Fee, atravesando sus numerosas grietas, hacia el teleférico de Längflue a 2870 metros ya que nos servía el ticket de teleférico.

Salimos de Saas Grund a las siete de la mañana en coche hasta el cercano aparcamiento que hay a la entrada de Saas Fee, donde no pueden entrar los vehículos, aparcamos, nos equipamos y al teleférico, tres etapas incluida la final del metro Alpin y, al salir, crampones, piolet y a andar.

La primera parte coincide con la subida fácil al Allalinhorn (al que es más bonito subir desde el refugio Britannia) y coincide también con la pista de esquí que lleva o trae a los esquiadores hasta el metro Alpin en Mittelallalin, al salir por la mañana no es problemático, pero al volver sí que hay que tener cuidado con los que bajan y que no quieren frenar algo para no tener que remar. Se cruza con otra pista e inmediatamente nos aparece el indicador de una senda a la izquierda que sube hacia el Feejoch (el collado Fee) que separa hacia la izquierda la subida al Allalinhorn y a la derecha hacia el Alphubel, enseguida nos encontramos con la arista rocosa del Feechopf a donde hay que subir directo según se lleva, de frente a la primera cumbrecita, nosotros, guiados por unas huellas procedentes de otra equivocación, estoy seguro, nos tiramos por la lateral derecha hasta darnos cuenta de que debíamos subir a la arista, complicadísimo, baste decir que se podía clavar el piolet entre las piedras que se descolgaban a nuestro paso, pufff ...

La arista se da como II+, quizá algún pasito pueda llegar a grado III, hay que seguirla buscando siempre el punto más alto en la primera parte 3888 metros, una bajada y el sendero se ve hacia la ladera izquierda, donde había algún nevero para inmediatamente incorporarnos a la arista y subir a la última cima 3846 metros. En toda la arista es importante decidir cuando nos descramponamos. Al final de la última trepada damos a una especie de meseta donde ya empieza de nuevo la zona nevada, nuevamente crampones y, a seguir. En esta arista hay que tener especial atención ya que no hay hitos ni señales, únicamente las huellas de anteriores grupos, las guías indican que, en caso de niebla es fácil perder la orientación.

Bajamos algo, hasta los 3780 metros al Alphubel joch, la senda está bien marcada y empezamos los cuatrocientos y pico metros de subida, mucho viento, a la altura de los 3950 metros una nueva arista toda en nieve y llegamos a la rampa final, con desniveles algo superiores al 50% y con alguna barra metálica que sobresale para facilitar el aseguramiento en las bajadas a los que vuelven por este lado.

En algo más de una hora desde el Alphubel joch llegamos a la meseta cimera y, en unos cinco minutos al hito de madera final a 4206 metros, tardamos cerca de seis horas pero es que perdimos más de una hora en el enmarronamiento al empezar la arista, puede hacerse en cuatro horas un poco largas.

La cima es una preciosidad amplia y la visión circular desde el Allalinhorn, Strahlhorn, Rimfishorn, a lo lejos Monte Rosa, Linskamn, Cervino, continuando la cima Taschhorn Dom, enfrente Lagginhorn, Weissmies, menos mal hoy tuvimos un día de cima despejado.

Para bajar dos opciones, volver por donde subimos o bajar por el glaciar hacia Längflue, elegimos la segunda opción ya que no la conocíamos, la primera parte, hasta los 4000 metros, empinada, bajando con cuidadín, se divisa enseguida el teleférico abajo, llegamos a la cota de los 3600 metros y giramos a nuestra izquierda, se nos ha hecho tarde y el glaciar está muy peligroso, muchas grietas, muchos saltos de un lado a otro en algunas, menos mal que hay huella, salvo al final en la zona de hielo más presente, pero bueno ya estamos cerca del teleférico, termina el glaciar, unas zonas de rocas y llegamos a Längflue a 2780 metros, poco más de tres horas de bajada.

Al bajar y liquidar en el hotel de Saas Grund, nueva sorpresa, lo que en sus publicidades te anuncian TVA incluido es cierto, pero intentan meterme una nueva pullita, un 3,80% como impuesto de la ciudad, que rastreros que son. Repito bastantes veces el tema de las actuaciones de los suizos y de sus precios porqué no es el primer caso en el que gente que va con un presupuesto ajustado, se encuentra con estas desagradables sorpresas.



lunes, 15 de agosto de 2011

Lagginhorn


Lagginhorn, con sus 4010 metros de altura, parte de los Alpes del Valais oriental, es una bellísima ascensión, dura a veces, con buenas rampas de nieve dura, bonitas trepadas calificado como PD y, si hace buen tiempo, buenas vistas.

Salimos del refugio de Hohsaas, a donde subimos andando el día anterior, para hacer el Weissmies, refugio donde como en todo Suiza te llevas la decepción por su manera de proceder, es el tercer año que subo a Suiza y me imagino que pocos, o ninguno más, todos los años bajas decepcionado, empezando por el truquito de todos los años a los turistas, planificas el viaje con un cambio Franco Suizo Euro que, al empezar el verano, indefectiblemente sube, en este año, llevándolo casi a la par, ello te lleva a que cenar en Saas Grund en un italiano, te cobren 40€ por un plato de espaguettis, pan y una cerveza, pero es que tienes que pedir servilletas, no ponen pan, por una botella de agua ¡¡¡ NUEVE EUROS !!! y, ojo, al refugio de Hohsaas le suben las cosas en el teleférico que termina junto a ellos, y al pagar, te quieren cobrar en euros a la paridad uno a uno con el franco, no, no, me cobra Vd. en francos con la tarjeta de crédito y que el cambio lo haga Visa. En fin, unas situaciones en las que te sientes engañado constantemente.

El refugio es nuevo, se cena a las seis de la tarde y el desayuno es a las cinco, ojo, en cuanto terminan, sobre las cinco y media, recogen y se acabó.

Subimos antes, andando, puede hacerse en teleférico, para poder hacer el día anterior el Weissmies, algo más de cuatro horas, desde detrás del teleférico de Saas Grund, por un sendero bien marcado hasta llegar al refugio de Hohsaas.

Salimos nada más desayunar, bordeando la estación del teleférico y tomando la pista de bajada hacia el refugio Weissmies (NE), a poco más de un centenar de metros (lineales), en una curva a izquierda vemos el sendero marcado con hitos, que nos acerca a la pared enfrente nuestra, donde vemos en diagonal hacia la izquierda una equipación con una sirga o especie de cable, después una trepada sencilla, sigue bien marcada con hitos y, al llegar arriba de la pared vemos el glaciar, no muy grande, casi un nevero, que atraviesa su cara oeste, bajamos hasta el glaciar-nevero y decisión, nos cramponamos o no, a pesar de que alguna cordada que va delante se ha cramponado, no lo vemos complicado, la nieve no está helada y decidimos atravesarlo con las botas directamente.

Atravesamos el nevero-glaciar para, casi en su final, girar hacia la izquierda, dirección oeste, y tomar una canal, aquí ya la señalización está con manchas rojas, canal que nos llevará a la arista, que tomamos hacia nuestra derecha. Al principio la arista, por zona rocosa, es fácil, con algún paso de grado II ó II+ que la hace divertida.

Las vistas por esta arista, hacia nuestra derecha (sur) nos presentan el cercano Weissmies, más atrás, el cordal de Allalinhorn, Alphubel, Dom, etc... y debajo nuestra a la izquierda (norte) el impresionante glaciar del Fletschhorn.

Poco más, en algunos momentos por zonas de mixto (nieve y roca) y llegamos a la zona de nieve, sólo nos quedan algo más de 400 metros de desnivel, pero, ¡para una longitud de unos setecientos metros según el GPS!, el desnivel, a veces, supera en poco el 50%, la senda muy pesada y en constantes zetas.

Un pequeño collado que nos da un breve respiro y, a través de la niebla, distinguimos la cercana cruz de la pequeña y aérea cima, fotos de nosotros y ninguna de las vistas.

Una ascensión con un desnivel de 965 metros que se lleva a cabp en cerca de cuatro horas desde el refugio Hohsaas.

La bajada con precaución al principio hasta llegar a la zona rocosa y, una vez atravesado el nevero-glaciar inicial nos separamos, unos volvieron por la misma ruta de subida hacia el refugio de Hohsaas a recoger la parte de equipaje que allí había quedado y yo acorté hacia la estación intermedia del teleférico en Kreuzboden a 2380 metros de altura por un sendero bien marcado con hitos pasando por el refugio de Weissmies, no me apetecía bajar más, mañana me espera el Alphuvel y hay que ahorrar energías. Para montar te indican muy amablemente que subas y que pagues abajo, ¡la madre que ...!, al llegar a la estación inferior te clavan 21FS, o sea 20€ por el descenso, en fin.

Las fotos de la actividad.

viernes, 12 de agosto de 2011

Weissmies



Fuimos a Suiza por Chamonix, cada vez me gusta más esta ciudad, por la mañana un paseo y tranquilamente tomamos la carretera de Chamonix a Martigny, una preciosidad de trayecto, recordando algunos de los puntos por los que pasamos al hacer unas semanas atrás el Tour del Mont Blanc , volvimos a pasar por Trient, por el Col de la Forclaz y ya, bajando hacia Martigny los típicos puestos ambulantes de venta de albaricoques, me paro en uno a comprar un kilo y ¡¡¡¡ 9€ un kilo !!!! pero ¿y esto, si hace un mes pagué 2€ por un kilo?, ya, si, pero ahora es agosto, vale, si, ya estamos en Suiza, abandonamos la idea y seguimos.

Llegamos a Saas Grund, a 1525 metros, uno de los cuatro pueblos de Saas, junto con Saas Fee, Saas Balen, Saas Almagell, todos con el encanto de los pueblecitos del Valais suizo. Ya teníamos hotel reservado y, sorpresa, como todos los años los suizos han revaluado su moneda de cara al verano, en este año, cercana a la paridad con el euro y en los hoteles y restaurantes te quieren cobrar en la paridad, hay que defenderse algo pagando con Visa en francos suizos.


Bien, olvidemos el tema económico y no hablemos del problemático tema del aparcamiento que esa es otra. Y al día siguiente, con tiempo salimos de Saas Grund hacia el refugio Hohsaas, a 3125 metros de altura, al que puede llegarse en teleférico, pero, aguerridos nosotros, decidimos hacerlo a pie y, ale, cerca de 1600 metros de desnivel que sirven para adaptarse mejor, cerca de cuatro horas y media pasamos por el pueblecito de TriftAlp a 2072 metros llegando hasta la instalación intermedia del teleférico de Kreuzboden a 2380 metros, continuamos hacia el refugio Weissmies a 2720 metros. Y llegamos ¿el refugio?, bien, cena a las seis, desayuno a las cinco (no te atrases que te quedas sin desayunar), cena sin pan, sin servilletas, sin agua (una botella nueve euros), o sea bien, en plan suizo. O sea ¿que los del refugio, después de clavarte 72FS por la estancia, te quieren cobrar otros 5FS por una ducha?, ya les vale. Si encontrásemos Hohsaashutte lleno, se puede dormir en el anterior, el Weissmieshütte a 2.725 metros.

Al día siguiente, nada más desayunar salimos hacia el Weissmies, 4027 metros de altura, un desnivel acumulado de 1050 metros aunque la distancia es corta, 7,25 Kms., a pesar de las nubes y del frío, una preciosidad de montaña, no es difícil, aunque tiene sus pasitos, pero es muy asequible, está catalogada como PD, es la más alta al noreste del Valais, subiremos por la vía normal, la sureste, dura, con inclinaciones de hasta el 40%.

Por detrás el refugio, por la pista que sube desde el anterior refugio, se baja algo y, enseguida, a pocos metros, a nuestra izquierda, marcado con la doble raya blanca y una roja en su centro, vemos la senda de salida, seguimos los hitos bordeando el repecho que queda a nuestra izquierda con el glaciar a nuestra derecha, en unos veinte minutos los hitos, y/o las franjas dobles con una roja intermedia, nos dejan en el glaciar del Trift, no en la base, el glaciar termina

bastante más abajo, crampones, nos encordamos y arriba, el glaciar está durillo, eso nos facilita la ascensión, hay siempre buena huella, en dirección sureste, atención a las grietas, algunas hay que bordearlas y otras exigen buenos saltos, nos dirigimos hacia el hombro o Pico Oeste, llegamos a una zona de seracs que no nos dan seguridad alguna de que cualquiera de ellos no se desprenda en cualquier momento, esta es, quizá, la zona más complicada de la ascensión, esta parte de la ruta se hace cambiante cada día, antes había una zona de escaleras, ahora bordeamos los seracs por debajo y rápido y giramos hacia nuestra izquierda, unos metros bastante aéreos.

A partir de aquí, más fácil, muy pendiente y pesado hasta llegar al collado existente entre el Pico Oeste y la cima que vemos a nuestra izquierda, trescientos metros de desnivel cercanos al borde de la arista oeste y llegamos a la cima.

Niebla y más niebla, pero al llegar a la cima se nos despeja un ratito y contemplamos hacia el norte el Lagginhorn, objetivo de mañana y hacia el sur la cuerda del Strahlhorn, el Rimpfishorn, el Allalinhorn, el Alphubel, el Táschorn, el Dom el ...

La subida se hace en poco más de cuatro horas y la bajada, ahora con más cuidado con las grietas, en alrededor de tres horas.

Las fotos de la actividad ....